Mariela Altamirano
Resulta que las culturas de todo el mundo han desarrollado una gran cantidad de alternativas de preparar (y beber) café, que incluyen de todo, desde jugo de limón hasta huevos y alcohol.
Cuando tengas antojo de tu café favorito, tal vez sea un macchiato, entonces te recomendamos adquirir tu tarjeta de cliente frecuente y comenzar a hacer uso del programa de lealtad; al formar parte de un programa de recompensas, recibes grandes beneficios todo el año. ¡No lo dejes pasar!
1. Pharisäer (café con ron alemán)
Pharisäer o café con ron, es una bebida decadente que se originó en Alemania, pero que realmente se puede disfrutar en cualquier parte del mundo. Es una de las alternativas más dulces a cualquier bebida alcohólica.
Similar al método irlandés, simplemente toma tu taza de café fuerte favorito, agrega azúcar y luego agrega un trago (o más) de ron antes de cubrir con crema batida y una capa de cacao.
Además, una buena cosa para recordar es que técnicamente no se supone que debes revolver esta bebida una vez que esté ensamblada, sino beberla a través de la capa de crema batida.
2. Café de Olla (Café Mexicano)
Casi al final de nuestro viaje está el café de olla o café mexicano con canela. Si bien no contiene alcohol, es similar al café irlandés o un pharisäer en que es más un postre que una bebida, pero no hay vergüenza en eso.
Es increíblemente fácil de hacer, solo toma agua, café grueso, azúcar morena y una rama de canela. Al final, hierve todo junto.
Luego lo retira del fuego y deja en infusión durante unos 10 minutos antes de colar y servir; opcionalmente, puedes agregar crema batida para que sepa mejor.
La canela combina excelentemente con el café y agrega otra profundidad de sabor, mientras que el azúcar morena agrega la decadencia de la que carece el blanco simple. Es ideal para la hora del brunch o en una noche.
¡Esta es una de las alternativas que no te debes perder!
3. Ceremonia del café etíope
El último de nuestra lista es más un ritual que un tipo de bebida, pero merece una mención de honor.
Similar a una ceremonia del té en Japón, la ceremonia del café tiene en cuenta todo, desde el tipo de tazas y ollas que se utilizan hasta la atmósfera del entorno.
Se realiza tradicionalmente como un signo de amistad y bienvenida y nunca debe rechazarse ya que sería un gran insulto para el anfitrión.
Para empezar, la mujer quemará incienso para ahuyentar a los malos espíritus y lo seguirá quemando durante toda la ceremonia.
Luego colocará una jebena, o cafetera de barro, llena de agua y la colocará sobre el fuego antes de tomar los granos de café verde y limpiarlos sobre las brasas.
Después de que el calor quita la cáscara, la anfitriona procederá a asar los frijoles sobre las brasas de manera similar a como se usa la estufa para hacer palomitas de maíz; por lo general, asará los frijoles hasta que tengan un color marrón medio a oscuro.
Luego, los frijoles recién tostados se muelen en un mortero y se agregan a la jebena, donde se lleva a ebullición toda la mezcla antes de servirla en tazas sin asas.
Todo el proceso puede llevar varias horas y cada parte debe tratarse con reverencia y respeto. Si alguna vez tienes la oportunidad de asistir a una ceremonia, ¡asegúrate de aprovechar la oportunidad!
¿Te gustaron estas alternativas que aquí te presentamos? No hay pretexto para no tomar una deliciosa taza de café.
